lunes, 28 de julio de 2008

Bailando tango


Concurridas clases de tango en la Casa de la Cultura del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires un sábado a la tarde. Una danza que recibe cada vez más danzarines nativos y extranjeros, a pesar de lo difícil que resultan los pasos de baile.
Se dice que en esta Capital del tango hay funcionando más de 300 milongas (locales donde se baila el tango).

jueves, 24 de julio de 2008

Entrevista a Lévi-Strauss

El jueves 24 de abril de 1997, en el suplemento “Cultura y Nación”, el diario argentino Clarín publicó una entrevista a Claude Lévi-Strauss. El periodista fue Michel Zlotowski, y destaca que aunque el antropólogo francés no concede entrevistas, tuvo una excepción ya que se considera amigo de la Argentina. En ese momento tenía casi 90 años y el artículo se tituló “Desencantos de un Mito del siglo XX”. El mismo giró principalmente sobre la etnología, la función de la tecnología en esta disciplina, el desencanto de la sociedad actual e incluso la ecología y una mirada hacia sí mismo. A pesar de oscilar en torno a una única disciplina, algunas reflexiones siempre son adecuadas para la ciencia en general y porque no para la vida cotidiana también.

Brevemente puede mencionarse que Lévi-Strauss fue el creador de un modelo teórico, el estructuralismo, que en los años 60´ desbordo la antropología social para ser aceptado al menos parcialmente por otras disciplinas sociales (lingüística, sociología, psicoanálisis e historia entre otras). Su esencia teórica puede resumirse como el abordaje estructural a temas tales como las reglas del parentesco, la prohibición universal del incesto, la exogamia e incluso la magia y los ritos. Estos y otros fenómenos sociales se tratarían de procesos enmarcados en sistemas de reglas culturales, que podrían ser analizados, desglosados y reducidos a principios de signos reglamentados por sistemas de comunicación. Es decir, que “…en esta perspectiva los fenómenos sociales se definen, pues, como lenguaje: las conductas, las instituciones, las tradiciones, son mensajes que yo puedo decodificar…” (Eliseo Verón, en el prólogo a “Antropología Estructural”, Paidós, España, 1992).
En “El antropólogo como autor” (Paidós, España, 1989), Clifford Geertz comentando la obra de Lévi-Strauss y aún declarándose como totalmente alejado del estructuralismo, reconoce que “…cualquiera que pueda ser el futuro de la circulación del intercambio de mujeres, de los mitemas, la razón binaria, o de la ciencia de lo concreto, el sentido de importancia intelectual que el estructuralismo aportó a la antropología, y más especialmente a la etnografía…tardará mucho en desaparecer…” (1989).

Seguir definiendo el estructuralismo y la obra de su creador puede resultar no solo complejo sino lo suficientemente abultado como para exceder la pretensión de esta nota, por lo que en los siguientes enlaces hay aproximaciones a su labor y su bibliografía halladas en Internet:


http://es.wikipedia.org/wiki/Claude_L%C3%A9vi-Strauss
http://www.revistaenie.clarin.com/notas/2008/05/24/01678675.html
http://es.geocities.com/antropokrisis/estructuralismolevistrauss.htm
http://www.psikeba.com.ar/recursos/entrevistas/LeviStrauss.htm
http://www.clarin.com/diario/2005/05/22/sociedad/s-05215.htm


Vale aclarar que lo que está publicado en Internet no alcanza ni por lejos obras suyas de fina complejidad como “El pensamiento salvaje”, “Las estructuras elementales del parentesco”, “Antropología estructural” o “Tristes trópicos” entre otras. Publicaciones que a veces alcanzan los 2 kilos y sobrepasan las 300 páginas, y que pudieron haber hecho cambiar varias mochilas o carteras a estudiantes de ciencias sociales durante una sola cursada. Es decir, un referente permanente.

El lugar del reportaje, en París, en el College de Francia, en el laboratorio de antropología social se encuentra la oficina de Lévi-Strauss. Así describe el periodista “…para llegar allí, es necesario subir una escalera increíble, oculta en el fondo de la biblioteca. ¿Cómo hace, con sus casi 90 años, para subir y bajar dos veces por semana por esta peligrosa escalera? Misterio. Porque Lévi-Strauss sigue yendo a su oficina todos los martes y los viernes. “No escribiré más libros, pero aquí vengo a leer.”

PERIODISTA: - ¿Su campo de estudio no se redujo singularmente desde que usted comenzó a trabajar?
LEVI-STRAUSS: - Por supuesto, pero ya se había reducido singularmente desde los comienzos de la etnología cuando yo comencé a trabajar. Cuando a fines del siglo XVIII se constituyó una Sociedad para el Estudio del Hombre, uno de los grandes argumentos en su declaración de fundación era que el mundo estaba transformándose con tanta rapidez que pronto las sociedades exóticas dejarían de existir. Cuando el año mismo de mi nacimiento (1908), Frazer inauguró en la Universidad de Liverpool la primera cátedra en el mundo llamada Antropología Social, dijo exactamente lo mismo.
Esto se remonta a mucho antes. En Montaigne, en el siglo XVI, ya se encontraba la idea de que estas civilizaciones americanas que se acababan de descubrir estaban condenadas a desaparecer. No hay nada de nuevo en esto, y es cierto que nuestros campos de estudio no dejan de limitarse, pero, al mismo tiempo, nuestros métodos de investigación y de trabajo son cada vez más finos y, en cierto modo, esto funciona como una especie de compensación.

COMENTARIO: Nunca hay nada nuevo bajo el sol, aunque lo que cambian son los métodos, y con ellos se amplia el conocimiento de un objeto, a veces útil y otras no tanto, pero el beneficio radica en que el bagaje sobre algún tema se amplia. Existe un curioso caso, el de
John Murra, quien construyó un modelo teórico acerca del estado Inca (el control vertical de pisos ecológicos andino) que aún es referencia obligada en la Universidad de la UBA por ejemplo, sin haber hecho trabajo de campo. Esta creación se baso en documentos etnohistóricos y su capacidad de abstracción. Es decir, ese refinamiento en los métodos de investigación cada vez mayor, es lo que permite indagar profundamente objetos de estudio, que como las sociedades etnográficas al estar cada vez más impregnadas por la sociedad actual, tienden a perder cada vez mas sus instituciones, su organización social o su cultura en general. Por otro lado, cuanto mas avanza la tecnología, que permite ampliar las herramientas disponibles, más información puede extraérsele al objeto de estudio, más datos, y bien aprovechados estos, un mismo objeto puede proporcionar novedosas respuestas.

PERIODISTA: - ¿La aparición de nuevas herramientas tales como la cámara digital…cambiará el trabajo de los etnólogos?
LEVI-STRAUSS: - …cuando yo ejercía en la investigación, el grabador todavía no existía. Nació durante la última guerra. Es cierto que yo tenía entre las manos una pequeña cámara que manejaba como amateur, con película de 8 mm. Rápidamente la abandoné, porque era necesario elegir entre mirar intentando comprender o ver con el ojo fijo en el objetivo de la cámara para tratar de hacer un buen encuadre. Para mí, el equipo ideal es un cuaderno de notas y un lápiz. Pero debo decir que si tuviéramos aunque sea un cuarto de hora de película hecha en la Atenas del siglo V antes de nuestra era, comprenderíamos más de Grecia que todo lo que se escribió sobre ella desde el Renacimiento…

COMENTARIO: ¿Quién pudiera contrastar la afirmación de estas últimas líneas? En ese año 97, la cámara digital era incipiente en contraste con la masividad que adquirió actualmente. Hoy en día es sabida la historia de vida de algunos artefactos que causan impacto tecnológico ni bien salen al mercado. Empiezan, por su alto costo, para unos pocos, pero enseguida se masifican, originando comportamientos de dependencia hacia los mismos en muchos casos.
Por otro lado, es una realidad que se este mas pendiente de la herramienta que del verdadero objetivo que se presenta en el contexto.

PERIODISTA: - ¿La observación no sería más objetiva con la utilización de este material? ¿El hecho de tener que trabajar sobre datos escritos recogidos por otros no dio lugar a distorsiones subjetivas?
LEVI-STRAUSS: - Pienso que nada cambiaría. El hombre que estuviera detrás de la cámara también influiría, nada más que con su elección: ¿Qué elegiría mirar, que intentaría escuchar? Sería similar, siempre habrá un intermediario humano…

COMENTARIO: No hay análisis objetivo, ni periodismo objetivo, ni nada que se quiera disfrazar de tal. Hay que reconocer que lo “objetivo” no existe. Cualquier acción humana siempre está orientada de acuerdo a la formación, el prejuicio, quien sea el que financie o el mismo bagaje adquirido, aún contra la voluntad de quien desee hacer algo “objetivo”. Lévi-Strauss lo reconoce cómodamente.

PERIODISTA: - Usted consagro su vida al estudio de sociedades, como se dice, primitivas. Sin embargo, publicó muy poco sobre las sociedades occidentales. ¿Por qué?
LEVI-STRAUSS: - …razones subjetivas…Muchos etnólogos, entre los que me incluyo, se inclinan por sociedades diferentes porque no se sienten perfectamente a gusto en la suya.
…Si bien es cierto que para estudiar una pequeña sociedad de Melanesia o del centro de Brasil no tenemos muchos medios de investigación más que ir allí a ver, cuando se trata de sociedades como la nuestra, la observación directa puede aportar muy poco en comparación con lo que la historia y los archivos nos ofrecen…hay que ser historiador…el estudio etnográfico luego podrá agregar pequeños fragmentos…mientras que cuando se trata de sociedades sin escritura y sin archivo, casi todo recaerá en el trabajo etnológico. Esto es cada vez menos así, porque hay pocas poblaciones en el mundo que no hayan sido vistas desde hace treinta, cincuenta, a veces cien o incluso doscientos años. Cada vez hay más archivos que consultar.

Comentario: hay muchísima gente que no se siente a gusto con su sociedad, lástima que no todos pueden dedicarse a ser etnólogos. Con respecto al análisis etnográfico en las sociedades modernas, puede resultar útil en la medida de que en cada comunidad, cada vez son más los grupos que componen la misma. Ya no se trata, como en la época de Lévi-Strauss de grupos de género, etarios o de clase. Actualmente la diversidad aumenta de la mano del crecimiento demográfico; los grupos relegados ya no son tan homogéneos, ni siquiera lo son los grupos de poder; las migraciones influyen de manera inusitada en la historia de la humanidad por ser tan fluidas e incluso hay grupos que en menos de un siglo han desaparecido por su oficio, como algunos de la clase obrera, y surgido otros, como los prestadores se servicios por ejemplo. Tal vez la etnografía urbana tenga cosas que decir.

PERIODISTA: - ¿No hay urgencia para las sociedades occidentales?
LEVI-STRAUSS: - No, no es lo que quiero decir. Siempre existe la misma urgencia, ya que estas sociedades cambian…la sociedad en París, en Buenos Aires, no será la misma mañana.

Comentario: El reconocimiento de la dinámica de la sociedad, del cambio y que motores movilizan a este, y hacia donde van los mismos es fundamental en el investigador desde mitad del siglo XX, teniendo en cuenta que fue un momento de transición entre viejas escuelas de pensamiento y el surgimiento de otras nuevas, incluso tan revolucionarias que han provocado cambios de paradigmas.

PERIODISTA: - Usted pasó su vida estudiando los mitos, las creencias, las religiones. ¿Tiene fe?
LEVI-STRAUSS: - No. Nunca experimenté ningún sentimiento religioso, ni siquiera en la infancia.
PERIODISTA: - ¿Qué reemplaza, en usted, el sentimiento religioso?
LEVI-STRAUSS: - Habría puntos de contacto, diría, pero no serían ni con el judaísmo ni con el cristianismo. Más bien con el sintoísmo. El único sentimiento de lo sagrado que puedo tener, o que puede acercársele, es que el que siento por el espectáculo de las especies animales y vegetales, de la diversidad, de la complejidad del mundo, de la belleza de las bestias e incluso de las piedras…

Comentario: La ecología es una mirada surgida en el siglo XX para contrarrestar la degradación de los recursos sustentables del planeta. Lévi-Strauss tuvo conciencia ecológica cuando ni siquiera se hablaba de ella, aún siendo europeo, ya que esta conciencia (en el sentido de cargo de conciencia) surge del mismo continente que produjo en mayor medida este tipo de degradación desde el surgimiento de la revolución industrial. Tal vez si la educación pública se iría orientando hacia los nuevos valores que van emergiendo como el ecologismo o hacia una enseñanza enmarcada en la evolución o el pensamiento científico orientado por la ética y la filosofía, en lugar de la religión en sí misma desde el creacionismo que ya parece anacrónico, quizás entonces habría un cambio de conciencia en la sociedad desde sus cimientos. En Argentina por ejemplo, si bien la educación pública es laica, lamentablemente no está pasando por un buen momento a diferencia de etapas anteriores no muy lejanas en el tiempo, pero que lo parecen. La otra opción, la enseñanza privada posee un fuerte arraigo en la enseñanza católica. Muchos confunden que estos valores son los adecuados (quizás por estar tan arraigados en la sociedad occidental), sin tener en cuenta que la dinámica mundial es acelerada y que las problemáticas se van diferenciando con respecto al recientemente pasado siglo XX.

Acerca del estructuralismo y su legado:

PERIODISTA: - ¿No hay, a la larga, un riesgo de reducir el pensamiento a un simple fenómeno mecánico, químico?
LEVI-STRAUSS: - No, sería el mismo tipo de reproche que me hacen cuando me dicen “usted suprime la persona, suprime el sujeto”. Muchas veces utilicé, y sigo utilizando, la imagen del microscopio. En el microscopio, hay una plataforma con objetivos de distintos espesores. Según el espesor que uno elija, en una gota de agua, se ven cosas totalmente diferentes. O bien se ve solamente el agua si uno la mira sin lente, o bien polvillos y sales si utiliza un espesor delgado. Con un espesor más grueso ve pequeñas bestias que circulan dentro y con un espesor mucho mas importante, verá las moléculas de las que están hechas estas pequeñas bestias y las pequeñas bestias mismas y no existirán. Es exactamente lo mismo en las ciencias humanas, ya sean cognitivas, etnología u otra. Usted elige un cierto espesor. Eso no quiere decir que los otros niveles no existan. Quiere decir que para las necesidades de su investigación, usted hace “como si” no existieran. Y, más tarde, todo eso será reintegrado y volverá a formar un todo.

Comentario: el punto de vista desde el cual se mira. Comprender esta postura es aceptar que existe la diversidad, y esto puede llevar, repitiendo lo escrito en el comentario a la primera respuesta de este reportaje, a que el mismo objeto puede brindar diferentes respuestas, dependiendo de la herramienta que se utilice. Por ejemplo, hace relativamente poco tiempo, la genética está realizando un aporte invalorable a la antropología en problemáticas como el lugar de la aparición del homo sapiens, su evolución y sus respuestas al entorno; a partir del estudio de los genes. Es decir que la genética es una herramienta aún en desarrollo con un potencial cuyo límite aún se desconoce, por lo que el bagaje de conocimiento se ampliara y la posibilidad de elegir un “espesor” para observar, analizar y producir hipótesis y teorías será de una abundancia sin precedentes en la historia de la ciencia.
Lévi-Strauss no parece haber dejado herederos, pero su pensamiento se sigue estudiando en las universidades, y al igual que otros modelos teóricos que parecen estar en decadencia, aún sirven como una mirada crítica y necesaria para la sociedad.

Las fotos corresponden al suplemento Cultura y Nacion del 24/04/1997 del diario Clarín.

Curso de Astronomía Cultural

viernes, 18 de julio de 2008

Raymond Kurzweil: la biología y su fusión con la tecnología

Es un reconocido científico especializado en la llamada "inteligencia artificial". Fue elegido entre los 18 pensadores más influyentes según la US National Academy of Engineering, es miembro de la Army Science Advisory Group, recibió el premio Lemelson-MIT Prize y se lo conoce también por anticiparse a unos cuantos acontecimientos, entre ellos internet.[1]
Fuente: http://www.innovar.gov.ar/blog/in-blog/tecnologia/raymond-kurzweil-la-biologia-y-su-fusion-con-la-tecnologia
Este video es una emisión de Redes, donde el científico Raymond Kurzweil explica porque piensa que, en un plazo menor de 40 años, la humanidad desbordará su esencia biológica para fusionarse con la tecnologí­a, asumiendo que los cambios serán tan trascendentales en los próximos años que superaran la imaginación más futurista.
Por supuesto que se plantean infinidad de interrogantes después de escuchar esta entrevista, donde lo escrito, producido e inventado hace menos de cinco años ya parece adornar prologar la historia de la ciencia que se está escribiendo.
Según Kurzweil el futuro ya está interactuando en experimentos con una primera generación tecnológica. El debate por venir acerca de la inteligencia artificial ofrece diversos interrogantes: ¿La humanidad trascenderá efectivamente su esencia biológica? ¿Cuándo la computación y los sistemas serán más potentes que la mente humana? ¿Qué segmento de la población mundial participará de esta innovación tecnológica? ¿Esta supuesta innovación, es una forma de manipuleo social que podrá ser aprovechada por el poder hegemónico? Se abre un debate filosófico, además Kurzweil apuesta a la existencia de los agujeros de gusano, la apertura del conocimiento exponencial que superará todos los límites, la conquista del universo una vez adquirido este conocimiento exponencial, lo espiritual en la evolución tecnológica, la superación de la evolución biológica, la existencia de Dios…interesante para escuchar, aunque cabe preguntar ¿Estará este científico viviendo en el último piso de una torre de cristal? El tiempo lo dirá.
Duración del video: 27 minutos.



La página oficial de Raymond Kurzweil: http://www.kurzweilai.net/index.html?flash=1
con artículos de él y sus colegas que siguen la misma tendencia.

[1] Atención: sin dejar de considerar el contexto, vale aclarar que Raymond Kurzweil también es empresario a pesar de los antecedentes presentados en el sitio de Innovar.

jueves, 17 de julio de 2008

Mi Buenos Aires Querible


Es un sitio oficial del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires donde se puede jugar con el conocimiento de los 100 barrios porteños, además de fotos profesionales de la ciudad, algo de historia y patrimonio cultural, entre lo principal.
Interesante para mostrar la ciudad y sus matices.

sábado, 12 de julio de 2008

Monasterio

Es un caserío que pertenece al partido de Chascomús, provincia de Buenos Aires. La mayoría de los visitantes que lo conocen pasan obligatoriamente por allí para llegar hasta la laguna La Salada, por lo tanto la mayoría son pescadores.

Desde la ruta nacional 2 puede verse el cartel indicador, apenas se pasa unos 30 kms.la ciudad de Chascomús. Como la mayoría de las poblaciones al borde de las rutas, resultan familiares por el nombre, pero son pocos quienes se detienen a visitarlas, algo por demás lógico cuando se tiene un destino predeterminado.
Este plano indica adecuadamente, como hay que entrar desde la ruta (Autovía) 2.


Cuando de cruzan las vías del ferrocarril puede observarse la pequeña estación.

Siempre por camino de tierra se llega al caserío, donde resalta el almacén La Querencia
y la Sociedad de Fomento de Las Yucas.
Una vez que se pasa el caserío hay que hacer unos 7 kms.para llegar a la laguna La Salada, de unas 500 hectáreas con profundidad máxima de 3 mt.
El acceso principal es por un camping, se paga una entrada accesible y se puede ingresar. Si se llega tarde en fin de semana es difícil conseguir bote, por lo que habrá que conformarse con la pesca desde la orilla.
Es posible capturar las especies tradicionales de esta zona: Tarariras, pejerreyes, bagres y los nunca deseados dentudos.
El sector de juncos en el centro de la laguna y en algún sector de la orilla, es según algunos expertos pescadores, el preferido por el pejerrey.
La orilla se presta ideal para matar el hambre del día con un buen asado, ya que como en todo día de pesca, a veces hay suerte y a veces no, por lo que no es aconsejable comer pescado fresco como primera opción. También es recomendable llevar una bolsa de carbón debido a que la leña en el campo no abunda.

Después de una lluvia es conveniente consultar sobre el estado del camino, ya que el mismo para llegar a la laguna es de tierra, aunque hay huella bien marcada.

Como para no olvidarse de donde uno se encuentra, basta dar vuelta la mirada para observar la inmensidad del campo, con sus isletas de árboles introducidos, producto de la colonización del hombre.
Por ahora, la principal atracción para el visitante de Monasterio parece ser su cercana laguna, ya que el caserío es pequeño y parece tranquilo, como muchos de los que salpican la pampa argentina.

El plano fue tomado del sitio
http://www.irapescar.com/lasaladademonasterio/index.html

domingo, 6 de julio de 2008

Espejos, Galeano y el lenguaje de los abanicos.

Aunque muchos científicos hayan pretendido algún estudio acerca de la diversidad total de lenguas existentes, esto siempre resultó inabarcable, ya sea porque como todo fenómeno dinámico, algunas desaparecen, se transforman o incluso nacen otras nuevas, producto de los imponderables culturales. Sin embargo, la historia, la lingüística, la antropología y otras disciplinas permiten aproximaciones que a veces deslumbran con el asombro.
En este caso la literatura por intermedio de Eduardo Galeano rescata el perdido lenguaje de los abanicos. En el libro “Espejos, una historia casi universal” (Siglo XXI editores, Madrid, 2008) Galeano recuerda lo siguiente:

ABANICOS

Las liberalas, que así les decían los policías de Cádiz, conspiraban en clave.
De sus abuelas andaluzas habían aprendido el lenguaje secreto del abanico, que lo mismo servía para desobedecer al marido o al rey: esos lentos despliegues y súbitos repliegues, esas ondulaciones, esos aleteos.
Si las damas se quitaban el pelo de la frente con el abanico cerrado, decían: No me olvides.
Si escondían los ojos detrás del abanico abierto: Te amo.
Si desplegaban el abanico sobre los labios: Bésame.
Si apoyaban los labios sobre el abanico cerrado: No me fío.
Si con un dedo rozaban las varillas: Tenemos que hablar.
Si abanicándose se asomaban al balcón: Nos vemos afuera.
Si cerraban el abanico al entrar: Hoy no puedo salir.
Si se abanicaban con la mano izquierda: No creas en ésa.

EDUARDO GALEANO, Espejos, 2008

martes, 1 de julio de 2008

Historia del Bitter Angostura


Aunque les pueda interesar a pocos, la historia del popular ingrediente de cóctel Bitter Angostura es interesante y está muy bien relatada por José Luis Álvarez Fermosel, el “Caballero Español” quien trabaja desde hace tiempo con Rolando Hanglin en sus audiciones de radio. El fragmento pertenece a un libro que reposa en los anaqueles de algunas librerías del centro de Buenos Aires, a veces erróneamente en la (ahora de moda) sección de gastronomía, ya que además de recetas esencialmente españolas, posee historias como la del Angostura, que eruditamente Álvarez Fermosel relata de esta manera:

“…procede de Páranas de Colombia, en la cordillera oriental…tras la batalla de Waterloo (1815), el médico militar –originario de Heidelberg (Alemania)- Walter Siegert colgó la casaca, viajó a Sudamérica y se convirtió en cirujano y jefe del lazareto de las tropas de liberación de Simón Bolívar (1783/1836). Siegert comenzó a elaborar allí una medicina contra las fiebres tropicales, para lo cual extrajo los jugos de todo tipo de cortezas de coníferas exóticas, entre ellas la del árbol angostura. En el compuesto incluía extractos de corteza de quinina, jengibre, canela, cardamomo, clavo, cáscara de naranja amarga, raíz de angélica y macis. De la madera de sándalo, el elixir adquirió su color rojo y de Angostura, la nueva patria de Siegert, su nombre. La denominación de la ciudad varió mas tarde –se llamó Ciudad Bolívar-, pero no la del bitter. La angostura da el último toque necesario a numerosas mezclas alcohólicas.”

Si bien el Bitter Angostura no es ni por lejos de una imprescindible necesidad para la vida humana, esta pequeña historia refleja el mecanismo de la gestación de ciertos descubrimientos fundamentales en pasados y recientes siglos; una mixtura donde jugaron un rol primordial la curiosidad, la casualidad, el ingenio y especialmente la necesidad; ingredientes, cualidades primigenias y motores del hombre a lo largo de su historia.